No te vayas nunca, Román.

Luego de que finalizara el partido que definía la Copa Libertadores, la cual finalmente obtuvo Corinthians, llegó la peor noticia para todos los amantes del buen fútbol. Juan Román Riquelme, en mi opinión el último enganche de oficio que le queda al fútbol argentino y hasta al mundial, presentó su renuncia debido a que ya no está según el al 100% y temía defraudar al equipo del cual es hincha. El 10 tenía contrato hasta el 30 de Junio de 2014 pero su partida ya era anunciada; su mala relación con el técnico Falcioni, que a su vez está totalmente apoyado por el presidente Angelici, y algunos inconvenientes presentes dentro del vestuario, hacían creer que la continuidad del problemático Román pendía sobre un fino hilo.

La historia de Riquelme en el "Xeneize" fue muy exitosa tanto como conflictiva. Debutó de la mano de Bilardo el 10 de Noviembre de 1996 ante Unión de Santa Fe, y desde ahí el crack nunca paró. En 1998, con la llegada de Carlos Bianchi le cedieron la 10 y como siempre, no defraudó; tras 6 años de sequía, condujo a Boca a obtener un campeonato local. En 1999, el equipo, a pesar de algunas bajas por lesiones, mantuvo su hegemonía a tal punto que logró la marca de cuarenta partidos consecutivos sin derrotas, récord absoluto para el fútbol argentino, y se adjudicó el bicampeonato, con18 tantos del "Toledo".

Un año más tarde, la estrella volvió a poner al azul y amarillo en lo más alto del fútbol sudamericano logrando la Copa Libertadores tras vencer al Palmeiras nada más y nada menos que en el estadio Morumbí. La siguiente copa también quedó en manos del club de la Rivera, tras vencer a Cruz Azul en la "Bombonera". En éste caso, Román obtuvo el premio al mejor jugador de la final. El 10 de Noviembre de ese año, casualmente a 6 años de su debut como profesional, participó en el partido de despedida de Diego Armando Maradona, que al finalizar el partido le entregó su camiseta.

En el 2003, tras varios roces con los dirigentes, fue traspasado al Barcelona por trece millones de dólares. Nunca pudo encontrar su lugar allí, aunque el gran nivel que desplegaba llevó al equipo español a meterse en cuartos de final de la Champions League.

En el verano de 2004, la nueva junta directiva presidida por Joan Laporta y el flamante entrenador Frank Rijkaard revolucionó el club con el objetivo de recuperar el nivel deportivo. El nuevo cuerpo técnico decidió ceder a Riquelme al Villarreal por dos temporadas. Allí formó dupla de ataque junto al delantero uruguayo Diego Forlán y juntos ganaron la Copa de la UEFA en el 2004.

En el 2005, Villarreal logró una épica 3ª posición y decidió comprar el 75% de su pase. Durante la temporada 2005/06, el Villarreal disputó por primera vez en su historia la Liga de Campeones y su actuación fue sorprendente; llegó a las semifinales. Las actuaciones tan destacadas de Riquelme en el equipo, llevaron a un club ignoto del fútbol español a los primeros planos del fútbol mundial, y lo instaló entre los clubes más destacados en la actualidad del fútbol español.

El 11 de Febrero de 2007, Mauricio Macri desembolsó dos millones de dólares para que el 10 regresara al club de sus amores. Nuevamente le tocó afrontar la Copa Libertadores, y otra vez no defraudó. Luego de una gran victoria en Porto Alegre por 2 - 0 con dos tantos del "Toledo", la escuadra del Sur de la Provincia de Buenos Aires se adjudicó la sexta Copa Libertadores. Como sucediera en 2001, fue elegido el Mejor Jugador de la Final de la Copa Toyota Libertadores, tras convertir 8 tantos en 11 partidos.

Cuando el 30 de Junio de 2007 venció el préstamo, Boca Juniors no logró obtener la extensión del mismo y Riquelme volvió al Villarreal. Sorpresivamente, el técnico en aquel entonces, Manuel Pellegrini, decidió no tenerlo en cuenta para la temporada. Tras arduas negociaciones, el club de La Ribera decidió abonar al Villarreal la suma de U$S 15.000.000 por el pase siendo así la suma más alta pagada por un club argentino por un jugador en toda la historia. Firmó contrato desde finales de 2007 hasta 2010. A su regreso, disputó el partido de vuelta de la Recopa Sudamericana en el que Boca se consagró campeón frente a Arsenal de Sarandí, marcando un gol impresionante de tiro libre sobre la hora de finalización del encuentro.

En diciembre de 2008, Riquelme logró coronarse con Boca como campeón del Torneo Apertura. En 2009 comenzaría uno de las peores crisis que vivió el club. En la primera mitad del año fue eliminado en 8º de final de la Copa Libertadores y quedó muy lejos en la disputa del torneo. En la segunda mitad de año, se despidió de la Copa Sudamericana rápidamente, y en el torneo quedó lejos de los primeros puestos.

A mediados de 2010, Román firmó su contrato hasta 2014 tras varias polémicas. Un año más tarde, con un Riquelme en un nivel muy alto, el "Xeneize" obtuvo el torneo apertura invicto.

El primer semestre de 2012 fue muy bueno en lo deportivo para el diez. Las lesiones no lo molestaron y pudo pelear los tres frentes (Copa Argentina, Torneo Local y Copa Libertadores) sin ningún inconveniente. Luego de perder ante Arsenal en la ante-última fecha, uno de los máximos objetivos del club quedó en el olvido y todas las fichas fueron insertadas en la final que debía disputar ante el Corinthians. Tras no poder lograr el título, la anunciada renuncia llegó y probablemente no va a haber más Riquelme en el fútbol argentino. No se descarta que cuando Falcioni abandone el equipo Rompan regrese pero todo queda en especulaciones.

Desde lo personal espero que, sea en el club que sea, podamos seguir deleitándonos con este maravilloso jugador, que sin dudas marcó la historia del fútbol argentino y mundial.

Alemania Federal 1974

En 1974, en Munich, Alemania Federal se consagraba campeón de la Copa del Mundo disputada en su país. Tras una intensa final ante la Holanda de Johan Cruyff, los dirigidos por Helmut Schon se impusieron 2-1 con tantos de Breitner y el recordado goleador Gerd Müller.
Alemania no era favorito en un principio, ya que, según cuenta Franz Beckenbauer, flamante capitán del seleccionado, se desprotegían atrás y no lograban hallar la velocidad y la fuerza que se proponían. Sin embargo, una vez que pudieron concretar lo que deseaban, ni “La Naranja Mecánica” pudo frenarlos.
Los alemanes mantenían siempre sus líneas unidas, poblando la mitad de la cancha en defensa, en arranque y en llegada. El único que no participaba de ese movimiento era el punta Gerd Müller, apodado “El bombardero de la nación”, un gran especialista en la definición con poco espacio mediante acciones rápidas y certeras. Contaban también con la presencia del “Kaiser” Beckenbauer, que además de ser el hombre de confianza del técnico Schon, fue un defensor central que marcó un antes y un después en su posición. Era un jugador muy difícil de pasar, y tenía una virtud que lo distinguía del resto; pasaba al ataque continuamente y terminaba varias jugadas como un delantero más.

El seleccionado, en la fase de grupos que compartía con Chile, Australia y Alemania Oriental, venció a los dos primeros y cayó por 1 – 0 ante la otra Alemania, en el que fue el único partido en el cual se enfrentaron. Luego, en la segunda ronda se consagró campeón del grupo venciendo por 2 tantos contra 0 a Yugoslavia, 4 – 2 aSuecia y 1 – 0 a Polonia. Más tarde le toco enfrentarse en la final a Holanda, como ya habíamos mencionado, y se coronó campeón.
Finalmente, Alemania Federal se quedó con el trofeo. Franz Beckenbauer aún sigue siendo recordado como uno de los mejores centrales de la historia.

La historia se invierte 71 años después.

En la tarde del 1 de Julio de 2012, San Lorenzo de Almagro disputó uno de los partidos más importante de su rica historia. Empató en el Nuevo Gasómetro ante Instituto de Córdoba por un tanto, y se salvó así de jugar la próxima temporada en la segunda categoría del fútbol argentino. Por otro lado, una semana atrás, Banfield se auto-condenó al descenso directo al obtener tan solo 22 puntos de 114 en juego, convirtiéndose en el primer equipo de la historia en perder la categoría teniendo una campaña en la cual había sido campeón, con la que había sumado 79 puntos. 

Esta foto que tomé personalmente de un cuadro colgado en una famosa pizzería del barrio de Nuñez, a pocas cuadras del Monumental, nos lleva 71 años atrás en el tiempo, a un campeonato que obtenía River tras un atractivo final. San Lorenzo, de la mano de Isidro Lángara, un español que anotó 24 tantos en esa temporada, finalizaba a  4 puntos del "Millonario" tras sacar solo 3 puntos de los últimos 12 en juego. 

La escuadra del Sur de la Provincia de Buenos Aires finalizó ese torneo del 41 en el ante último puesto, con la curiosidad de que le habían descontado 16 puntos por algunos dirigentes corruptos que estaban acusados de comprar partidos. Cabe destacar que luego del reciente descenso, el ex presidente del club, Portell, presentó su renuncia con una dura acusación de una gran parte de los socios que decían que en las últimas elecciones se había registrado fraude. La diferencia entre estos dos torneos es que, en el actual, "el taladro" descendió a la B Nacional, y en el que mencionábamos antes, el único equipo que perdió la categoría fue Rosario Central, ya que en aquel entonces solo descendía un equipo. 

Las realidades de estos dos equipos hoy en día son muy difíciles, pese a que uno está un poco mejor que el otro, ya que aunque sea, tiene un presidente electo a cargo. Banfield vuelve a la segunda categoría tras un prolongado paso por la primera división, y San Lorenzo arrancará la próxima temporada aún en la máxima competencia argentina pero muy complicado en la tabla de los promedios (Empieza con 91 puntos. El último con 90). Esperemos que con el tiempo y empezando de cero, las instituciones puedan arreglar todos los conflictos diligenciales y futbolísticos que se le presentan en la actualidad y volver a ser lo que fueron hace no muchos años.